Álvar Carrillo Gil, el coleccionista devoto al arte mexicano
La colección de Carrillo Gil es una de las más importantes de México y Latinoamérica.
En 1938, el pediatra Álvar Carrillo Gil entró a la Librería Central de Publicaciones, ubicada en frente de Bellas Artes. Dentro del recinto, el médico compró un dibujo sobre papel de 42x26cm hecho por un joven artista llamado José Clemente Orozco. En esa época, Orozco no era muy conocido, así que casi nadie compraba sus obras, sin embargo esta adquisición marcó el inicio de algo grande.
La obra de Clemente Orozco fue el punto de partida para que Carrillo Gil comenzara una de las colecciones de arte más importantes del país. Dentro de su acervo, conformado por poco más de mil 400 pizas, hay obras de Orozco, Rivera, Siqueiros, Gerzso, Paalen y Nishizawa, entre otros.
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Museo de Arte Carrillo Gil
La colección que comenzaron en 1938 Carrillo Gil y su esposa, Carmen Tejero, necesitaba un lugar para prevalecer. Por ello, a finales de la década de los cincuenta, el proyecto de un recinto quedó en manos de los arquitectos Augusto H. Álvarez y Enrique Carral Icaza.
La construcción comenzó en 1960, pero por problemas económicos, la obra se detuvo por varios años. El proyecto se retomó en 1973, un año después se fundó el Museo de Arte Carrillo Gil (MACG), lugar que alberga la gran colección de arte del médico, y que tiene una biblioteca dedicada al arte.
La colección del MACG está integrada por obras de Diego Rivera, Rufino Tamayo, José Clemente Orozco, Wolfgang Paalen, Gunther Gerzso, Kishio Murata, Luis Nishizawa, José Luis Cuevas. También cuenta con un conjunto de estampa japonesa que forma parte del acervo. Actualmente, el museo custodia una colección de más de 2 mil 100 piezas.
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La devoción del médico por el arte mexicano
El coleccionista se enfocó en seleccionar obras esenciales, novedosas y provocadoras del arte en su época. Por eso mismo, en su colección se encuentran obras de caballete, grabado, litografía, serigrafía, collage, fotografía y escultura.
Además, y gracias a esa voluntad que tenía el médico y amante del arte por compartir su colección, creó una gran biblioteca especializada en arte. Dentro de ella, se encuentra un gran acervo de libros de varias disciplinas artísticas.
El también pintor llevó a cabo varias obras individuales, las cuales mostró en la Galería de Arte Mexicano «Inés Amor» y en la Galería «Antonio Souza». Sus obras, tanto las de colección como personales, han sido prestadas en París, Estocolmo, Londres, Lima, Tokio, Nueva York y Moscú, entre otras partes del mundo.
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El legado de Carrillo Gil a 47 de su partida
En la actualidad, el recinto artístico trabaja en la investigación, difusión, y búsqueda de nuevas maneras de de comprender la relevancia del acervo conformado por Carrillo Gil y su esposa. Gracias a estos esfuerzos, la colección ha ido en aumento, pues en 2014, la familia Gil donó una pintura más de José Clemente Orozco: el Retrato de Doña Carmen Tejero de Carrillo Gil.
Hoy, 5 de octubre, en el aniversario luctuoso del médico, artista y coleccionista, vale la pena enaltecer el trabajo realizado que sirvió para conjuntar y exponer en un solo lugar gran parte del arte mexicano a través de la historia.
Con información del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura y la Secretaría de Cultura.
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